Cittadella

La ciudad, con sus maravillosas murallas, nació en 1220 por volutad del minucipio de Padua. Desde aquel momento los elementos más característicos de la ciudad fueron la excepcionalidad del anillo de murallas y la posición estratégica, en todo el territorio de Padua. Hasta la edad del bronce resulta documentada la presencia del hombre en el área donde nació Cittadella, mientras en época romana fue interesada por un importante centuriación agrícola, que tenía como decumano máximo la via Postumia, construida en 148 antes de Cristo.

A partir del siglo XI se formaron señorías rurales con una serie de minúsculas aldeas, construidas alrededor de parroquias, como la de S. Donato y de abadías, como la de S. Lucia de Brenta.
En la Edad Media, inmediatamente después de su fundación, Cittadella garantizó al municipio de Padua una base desde la cual constrastar el poder de los señores rurales locales, como la aristocracia del feudo de Onara y de Fontaniva.

Caída en manos de Ezzelino da Romano durante un breve periodo, adquirió un papel estratégico con respecto al territorio circunstante durante la segunda mitad del siglo XIII, siglo en el que la ciudad conoció un notable desarrollo. En 1236 Padua concedió a la ciudad la posibilidad de tener sus propios estatutos.

En 1318 Cittadella pasó bajo el dominio de Cangrande de la Scala. Volvió sucesivamente bajo el control de Padua, en aquel tiempo señoría de los Da Carrara. En el siglo XIV el papel de Cittadella creció ulteriormente y la Podestería (sede y territorio del gobernador) se amplió.

En 1405 Cittadella se entregó espontáneamente a Venecia, obteniendo en cambio la posibilidad de conservar sus estatutos. A partir de 1483 fue donada por Venecia a Roberto Sanseverino; sus sucesores tuvieron su propiedad hasta 1499, mientras durante un año, de 1503 a 1504, fue donada a Pandolfo Malatesta, después de los acuerdos jurados entre Pandolfo y la República de Venecia.

El año 1508 marca el nacimento de la liga de Cambrai, en contra de Venecia. Malatesta, señor de Cittadella, pasó al enemigo. Por este motivo la ciudad fue atacada y saqueada muchas veces por la trupas del impero. La paz veneciana fue restaurada sólo en 1516.

Después de estos tempestuosos acontecimentos, Cittadella conoció tres siglos de paz, interrumpidos en 1797, cuando las tropas napoleónicas se imposesaron de todo el territorio que pertenecía a la República de Venecia. Cittadella entró a formar parte del departamento del Bacchiglione y, durante un cierto tiempo, también de la provincia de Vicenza. A partir de 1814 también Cittadella pasó bajo la dominación austríaca, terminada en 1866, año en el que fue finalmente anexa al Reino de Italia.

Las Murallas de Cittadella
Las murallas que rodean Cittadella (1220 después de Cristo) tienen forma de elipse irregular y con la aldea constituyen un complejo orgánico con el más alto interes histórico, no sólo por los estudios sobre los castillos, sino también por los de urbanismo. El espacio interior que las murallas delimitan es ordenado por dos calles que se cruzan y que unen las cuatro puertas con el centro, dividiendo la aldea en barrios, divididos como un tablero por las características puequeñas calles.

Las murallas comunican con el exterior a través de cuatro puentes en correspondencia de las puertas (contruidas en los cuarto puntos cardenales), dirigidas hacia las ciudades vecinas de Padua, Vicenza, Bassano del Grappa y Treviso (de allí el nombre Porta Padovana, Porta Vicentina, Porta Bassanese, Porta Trevisana). Los puentes levadizos, mantenidos en servicio hasta el siglo XVI, progresivamente se sustituyeron con otros en albañilería. Los puentes modernos remontan a la primera mitad del siglo pasado.

Informaciones
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